108. Beltane, fiesta de la fertilidad

    * “Beltane es la celebración de la fertilidad por excelencia; se celebra la madurez del Dios y la Diosa y su unión, celebrando la regeneración de la vida y honrando la sexualidad. Beltane es para muchos paganos el momento indicado para la celebración del Gran Rito, el Matrimonio Sagrado. Entre el campesinado, la noche de Beltane se encendían grandes hogueras, y las parejas salían a hacer el amor sobre los campos, considerando que esto contribuiría a obtener una mayor cosecha.” Vaèlia Bjalfi, “Beltane”

 

    * “Beltane es el momento en que las preocupaciones y los miedos del invierno son desechados, dando paso a la exuberancia juvenil, la actitud juguetona y la sexualidad. La gente baila eufórica alrededor de los mayos (troncos clavados en vertical) en una representación simbólica de la unión entre la Diosa y el Dios, creando un Círculo Sagrado de abundancia […] Gente joven pasa toda la noche en el bosque haciendo el amor para bendecir el campo y fertilizar el suelo. Otras parejas se quitan las alianzas y sus restricciones.

    Es tiempo de excitación salvaje y día para apreciar el cuerpo y su capacidad divina para el placer. Se honra al sexo en su aspecto creativo, como portador de alegría y generador de nueva vida. Los niños concebidos en este día son llamados alegremente venidos y se decía que estarían bajo la protección de los dioses. Beltane es la reivindicación del cuerpo como algo sagrado. El sexo no es pecado, hacer el amor en los campos asegura una buena cosecha en otoño.” Scout Cunningham, “Guía para el practicante solitario”

 

    * “Nuestros antepasados también tenían más formas de saludar estos días de celebraciones y participar de la energía sanadora del astro-dios; una de sus costumbres consistía en levantarse antes de que el sol apareciese, después de una vigilia en los bosques sagrados, donde habían participado en los ritos sexuales de Beltane, iban a alguna colina cercana para observar la salida del sol y bañarse en sus vivificadores rayos. Dicho baño podía tomarse también de una forma más simbólica, bañándose en fuentes sagradas y manantiales en los cuales los rayos del sol habían quedado atrapados o bebiendo el agua de estos pozos. Los druidas aconsejaban que se bebiera el agua de esos manantiales antes de la salida del sol, que se lavaran con el rocío de la mañana y se adornaran con flores. Todo este ritual era para danzar en torno del árbol de mayo, dejándose llevar por la festividad estacional. El rocío, en su concepto mágico, era considerado una esencia destilada de la Tierra por medio del fuego (el sol), una alquimia de la naturaleza espiritual de la Madre Tierra, en cuyo seno los manantiales y arroyos representan sus órganos femeninos con sus propiedades curativas. La Madre Tierra era la esposa del Sol, ambas deidades, donadoras de vida.” Universo de sueños, “Beltane”